Un páncreas biónico para tratar la diabetes

Hoy en día, contamos con medidores de glucosa muy sensibles y versátiles, con bombas de infusión de insulina inteligentes que reparten la administración del fármaco a lo largo del día y evitan las inyecciones y con una educación diabetológica muy elevada para los pacientes.

Pero la piedra filosofal del tratamiento, una máquina que pudiera hacer todo eso a la vez no existe. Es decir, un aparato que conozca los niveles de glucosa, sepa lo suficiente sobre las características del paciente y decida en tiempo real cuánta insulina administrar en cada caso… eso es libertad.

Un equipo de investigadores de la Universidad de Boston y del Hospital General de Massachusetts dice haber dado un paso para lograr tal máquina. Se trata de la última versión de un páncreas biónico que ha sido probada con éxito en dos ensayos clínico de cinco días con adultos y con adolescentes. El aparato controla automáticamente los niveles de glucosa en sangre de los pacientes administrando las dosis correctas de dos hormonas: la insulina y el glucagón. La primera disminuye la cantidad de glucosa y la segunda hace justo lo contrario.

La herramienta consiste en un trío formado por un smartphone, una bomba de insulina y un medidor de glucosa. Tanto los adultos como los jóvenes que han formado parte de la prueba han calificado la experiencia de «absolutamente liberadora», cercana a la sensación de no tener que prestar atención a su condición de diabético en ningún momento del día. Lo dicho: libertad.

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